Patricia Césari
- ¿Cuándo y dónde nació?
- El 11 de agosto de 1961 en San Martín, Bs.As.
- ¿Dónde cursó sus estudios?
- En Villa Ballester, en la Escuela de Educación Media N° 7 Mariano Moreno de 1° a 3°, y 4° y 5° año en la Escuela Media N° 2 Fray Luis Beltrán, en Matheu.
- ¿Qué recuerdos guarda de la infancia, juegos, miedos, amigos?
- Algunos tristes, vengo de padres separados, no se llevaban muy bien que digamos. Familia numerosa por las dos partes, tanto de padre como de madre, una nona divina que me llevaba de la mano a todas partes y me hablaba de su bella Italia y sus costumbres.
Mis juegos, muy barriales. Con los chicos jugábamos a la mancha, las bolitas, payana, el elástico, balero, pelota, rayuela, escondidas, a las figuritas etc. Los miedos, al fantasma que entraba por la cerradura de la puerta de noche, a las películas de terror de Narciso Ibánez Menta. Los amigos de infancia que recuerdo, Patricia y Plácido Stutz, Antonio, Gabriel, Miguel, Cacho, Nora, Betty.
- ¿Cuándo y por qué vino a vivir a Escobar?
- Cuando compré el terreno para construir mi casa.
- ¿Cómo se empezó a interesar por la política?
- Mi madre siempre me llevó a actos partidarios peronistas y me hizo partícipe de la militancia en San Martín.
- ¿Por quién votó la primera vez que votó?
- Por Italo Argentino Luder, y más allá de la derrota, fuimos con euforia todos a festejar el regreso de "La Democracia" al Obelisco. Algo inolvidable.
- ¿Qué lee habitualmente, diarios, revistas, libros, Internet, medios locales?
- Diarios y revistas locales, y diarios en Internet.
- ¿Qué programa de tele no se pierde?
- Tres poderes, con Luis Majul.
- ¿Cuál es su película preferida, o la que le gustaría volver a ver?
- Me impactó Corazón Valiente por Mel Gibson, y me gustan las comedias.
- ¿Actores y actrices preferidos, argentinos y extranjeros?
- Con los nombres no soy muy buena, Franchela, Andrea del Boca, Moria Casán, Susana Giménez, Porcel, Olmedo, Tristán, Lolita Torres, Luis Sandrini, Angel Magaña, Niní Marshall. Extranjeras: Julia Robert, Whoopie Golberg (Cambio de Hábito), Mel Gibson, Michael Douglas.
- ¿Un equipo de fútbol, un jugador querido?
- River y Maradona.
- ¿Comidas preferidas? ¿Se las arregla en la cocina?
- Pastas, Parrillada. Sí, me las arreglé muy bien siempre.
- ¿Tiene un hobbie, un pasatiempo, una pasión por fuera de su profesión?
- La pintura, escuchar música, tejer, me apasiona relacionarme con las personas.
- ¿Qué cosas lo hacen reír?
- Tantas cosas; la gracia y la inocencia de un niño, una buena comedia, compartir hazañas y experiencias con amigos, la vida misma.
- ¿Un lugar para vacacionar?
- El mar.
- ¿Un lugar para vivir?
- Mi casa, y si fuera otra, una casa con mucho parque arbustos y flores.
- ¿Un viaje soñado, realizado o por concretar?
- Italia, Grecia.
- ¿Su prócer o político preferido, nacional o extranjero?
- Admiro a Evita y a Perón.
- ¿Qué opina de nuestra presidenta?
- Sin palabras, muy actriz.
- ¿De nuestro gobernador?
- Mucho ruido y pocas nueces.
- ¿Y de nuestro intendente?
- Eso, nuestro Intendente.
- ¿Alguna vez delinquió?
- Cuando le llevaba flores a la maestra.
- ¿Cuál es su mayor virtud?
- Amar a la vida.
- ¿Y su mayor defecto?
- La sensibilidad.
- ¿De qué se arrepiente de lo hecho o no hecho en su vida?
- De nada, cada día está para hacer en esta vida.
- ¿Qué necesita Escobar para ser más amigable con usted?
- Más personas de buena voluntad con deseos de construir un Escobar pujante.
- ¿Si pudiera empezar de nuevo su vida qué sería?
- Lo que soy, porque cada día lo comienzo.
***
Patricia Césari tuvo un gesto de lealtad hacia su jefe político, Luis Abelardo Patti, que fue único. Todos sus compañeros de bloque, que ingresaron por el Paufe, se pasaron al PJ, menos ella.
Desde el punto de vista meramente político se puede interpretar de varias maneras, pero como gesto realmente la dignifica; llegó por el Paufe mayoritario y se va con el Paufe solamente defendido por ella, en abrumadora minoría.
Cuando le tocó defender su idea política, equivocada o no -nunca nos pondremos de acuerdo-, lo hizo con valentía; le hubiera sido mucho más fácil y provechoso seguir la corriente y no nadar contra ella, como el salmón que queda a merced del oso.
Enamorada de una idea política que huye en retirada, gracias a ella, ese retroceso se tiñe, aunque sea un poco, de dignidad.
