lunes, 8 de junio de 2009

PARTIDO OBRERO

Entrevista a un partido de izquierda
Néstor Pitrola es el candidato a diputado nacional que representando a la izquierda revolucionaria tiene más posibilidades de ingresar a la legislatura según las encuestas. El candidato vota en Escobar y está ligado al distrito por sus largos años de trabajo en la ex Editorial Atlántida. Manghi y Fateche son los dos candidatos más jóvenes de toda la grilla, jóvenes que abrazan la militancia sin pedir nada y no como salida laboral. Vale la pena escucharlos, en ningún otro lado se podrán explayar con tanto espacio.
Néstor Pitrola
- Al PO le va mejor en el campo de las luchas populares que en el electoral. ¿Porqué piensa que se da este fenómeno?
- El PO entra reforzado al desembarco en la Argentina de la crisis mundial capitalista como consecuencia de su papel como organizador y orientador en las luchas más destacadas de la clase obrera, pero al mismo tiempo progresa en los sindicatos y listas clasistas y acaba de ganar la presidencia de la FUBA en un desarrollo sin precedentes de una juventud obrera y socialista, después del papel jugado en el movimiento piquetero y las asambleas populares posteriores al Argentinazo. Los progresos electorales en varias provincias del norte (Salta, Tucumán, Santiago, Jujuy, Catamarca y Chaco) y la Patagonia y los que anticipan todas las encuestas en la provincias de Buenos Aires, son consecuencia de esa inserción. La batalla política electoral tiene que enfrentar el poder de una clase social capitalista que domina el Estado, los medios de producción y los medios de comunicación y virtualmente proscribe, a la izquierda en general y a la nuestra en particular.
- Desde el retorno al sistema electoral participaron (la izquierda) de 13 elecciones y nunca pudieron constituirse en referencia masiva. ¿No es hora de cambiar de táctica y unirse en torno a un programa mínimo común?
- No hay programa mínimo común. Un sector de la izquierda se plegó al kirchnerismo en el enfrentamiento con el capital agrario y hoy va con el banquero Heller del PC, otro se plegó a la Mesa de Enlace de la patronal rural (MST, PCR, etc.). La autoridad del PO se ha visto reforzada como corriente anticapitalista que es su eje de intervención, referenciada en la clase obrera urbana y rural, con una política para que la crisis la paguen los capitalistas. Hoy reagrupa el voto de izquierda y promueve una coalición anticapitalista a toda la juventud que rompe con los políticos del sistema y a la vanguardia de todas las luchas obreras y populares.
- El cambio de modelo económico, de una faz neoliberal a otra neodesarrollista, ¿alienta o frena las luchas obreras?
- El emprendimiento de "nacional y popular" de "reconstrucción de la burguesía nacional" (respetar comillas por favor) del kirchnerismo está tocando a su fin como consecuencia de su propia impotencia. La presente fuga de capitales, la crisis de deuda externa y el saqueo del Anses para pagarla, las gestiones de CFK y de la cancillería en el grupo de los 20 y en la reunión de los presidentes latinoamericanos con Obama para volver al FMI y el pedido concreto de 1.800 millones de dólares al BID, son manifestación de la quiebra de un esquema de negocios. Los Techint, los Arcor, los Urquía de Gral. Deheza, que fueron la "mesa chica" del kirchnerismo hoy piden más devaluación y vuelta del FMI, y el gobierno se adapta crecientemente a estas exigencias. Argentina enfrenta la crisis con una enorme desigualdad social y trabajo en negro, con precariedad laboral, con los recursos estratégicos privatizados y con sometimiento nacional al capital financiero. La nacionalización de las AFJPs no está sirviendo a los jubilados sino a la banca que sigue cobrando los bonos indexados del canje de deuda de Kirchner-Duhalde-Lavagna.
- ¿Cómo explica que la derecha esté tan de tapones de punta contra este gobierno?
- La derecha más importante proviene de este gobierno mismo: Reutemann, Schiaretti, Solá, etc. Tiene la misma base de punteros y "lobbis" capitalistas, por eso el desaguisado de colectoras y cortes de boletas y candidaturas falsas (mal llamadas testimoniales) en la provincia de Buenos Aires. El gobierno cogobierna ya con los negocios de Macri en la Capital y fue socio de la patria sojera que lo abandonó ante la crisis mundial y sus consecuencias inflacionarias y fiscales en la Argentina.
- ¿Cuál es el partido de izquierda con el que tienen más afinidad y cuál con el que menos afinidad tienen?
- No es posible esta contestación cuando el ex MAS se ha dividido en más de 25 grupos y el PC en algunos menos.
- ¿Cuáles diferencias ven entre las distintas variantes de oposición al gobierno K?
- El PJ disidente tiene lazos más aceitados que la Coalición Cívica con la burguesía y la burocracia sindical, (hoy cooptada por el gobierno, tanto con Moyano de la CGT como con Yasky de la CTA), lo cual es siempre un factor de contención cuando han desembarcado más de 200 mil despidos y otras 100 suspensiones en el país, cuando la Pcia. de Bs. As. está en un rojo que asciende a 8/10 mil millones y se saquean los fondos del IPS al igual que los del Anses. Este es el punto, por el cual a pesar de su dólar a $5 y el indisimulado llamado al FMI y a la caída definitiva de las retenciones, Prat Gay y Carrió son menos "gobernables" que la disidencia pejotista.
Los candidatos más
jóvenes de Escobar
- ¿Qué edad tienen?
JM: Mi nombre es Juan Martín Manghi y tengo 23 años.
JP: Mi nombre es Juan Pablo Fateche y tengo 22 años.
¿A qué se dedican?
JM: Soy estudiante de la Universidad de Buenos Aires en la carrera de Sociología. Estoy cursando el segundo año de la carrera. Tengo dos trabajos actualmente para sostener mis estudios universitarios.
JP: Yo estudio el Magisterio en el Profesorado de Escobar. Trabajo por las mañanas.
- ¿Cómo fue que se "metieron" en política?
JM: Mi primer contacto con la política lo tuve en la UBA a los 18 años cuando comenzaba mis estudios. Sin embargo, desde chico siempre me interesó el tema y comencé a leer varios libros que tenía en casa. Mi mamá con algún pasado de militancia en el peronismo tenía todo tipo de libros de política que comencé a leer. Así comenzó todo. Pero mi contacto fundamental fue la lucha que llevamos adelante con la FUBA (Federación Universitaria de Buenos Aires) por la democratización y la defensa de la educación pública y gratuita. En el transcurso de esa lucha me incorporé al Partido Obrero y a la Unión de Juventudes por el Socialismo (UJS), nuestra organización juvenil.
JP: El contacto lo tuve también en la UBA, cuando me pasaron la Prensa Obrera, el periódico que editamos semanalmente. Antes estaba interesado en la política, pero no encontraba un lugar que me convenza. Al poco tiempo me incorporé al Partido.
- ¿Cuánto hace que militan y qué tiempo le dedican?
JM: Milito desde hace 5 años aproximadamente. El tiempo que le dedicamos varía según las circunstancias. Ahora que estamos en una intensa campaña electoral, por lo corta y lo agitado de la situación política, casi todo el tiempo estamos abocados a esa tarea. Pero más allá de eso, le dedico todo el tiempo posible porque me apasiona la lucha y defensa de nuestros derechos como estudiantes y trabajadores que somos.
JP: Yo hace un poco menos que estoy, diría hace 3 años y algo. Y si, con respecto al tiempo varía si estamos en épocas de parciales y si estamos con mucho trabajo...
- ¿Qué país o gobierno, pasado o presente, tienen como modelo político?
JM: Nosotros reivindicamos la etapa histórica abierta por la Revolución Rusa de 1917. A partir de ese momento se abre un periodo extraordinario de revoluciones por todo el mundo, donde los trabajadores emprenderán una lucha impresionante contra los ataques a sus condiciones de vida. Anterior a la revolución rusa, muchos de los intentos emprendidos fracasarán rotundamente. La revolución del 17 será la primera victoria que tendrá un alcance mundial y que hasta el día de hoy sigue planteada su vigencia.
JP: Claro, tampoco podemos dejar de mencionar la revolución cubana del 59', que fue la primera revolución victoriosa luego de la derrota de trabajadores bolivianos en el año 1952. En la actualidad, no defendemos a ningún modelo en particular. Ese modelo hay que construirlo. Quiero decir, nos planteamos la construcción de un partido de los trabajadores y los explotados, para luchar por un gobierno de los trabajadores.
- ¿Creen que el Peronismo es reaccionario, progresista o contradictorio?
JM: El carácter del peronismo es definitivamente contradictorio. El peronismo 'fue' un movimiento nacionalista de contenido burgués. Digo 'fue' porque hoy no vemos más que una reedición deformada de los actuales exponentes del peronismo. Esa experiencia los trabajadores la han agotado, pero no la han superado. Esto es que el peronismo ha demostrado sus límites a la hora de defender los intereses y reivindicaciones de los trabajadores.
El kirchnerismo se propuso reconstruir esa experiencia nacional y popular y ha fracasado. El punto reside, sin embargo, en lo siguiente: luego de la traición de Perón en el '55 cuando el pueblo trabajador salió a las calles para defender a su gobierno de la dictadura que se avecinaba, sólo se limitó a decir "no vamos a derramar sangre entre los argentinos". O sea, mientras el pueblo reclamaba la movilización y enfrentar a la dictadura, Perón se negó. No podía ser de otra manera. Los intereses que se defendían eran los de la burguesía nacional. Emprender tal cometido significaba ir más allá de lo que el peronismo podía dar. Posteriormente, se derramó mucha sangre, en especial la de los trabajadores y estudiantes que enfrentaron a las siguientes dictaduras militares.
JP: Exacto. El peronismo, como todo movimiento nacionalista burgués busca por un lado movilizar a las masas apoyándose en un discurso antiimperialista pero regimenta a dicho movimiento en función de salvaguardar los intereses de la burguesía nacional. Por ello, su carácter reaccionario. No puede ir más allá que los intereses que representa. No hay que olvidar aquel contexto histórico. La burguesía nacional buscaba explotar el hecho de una Europa destruida por la 2da Guerra Mundial y colocarse como una potencia, o sea salirle a disputar al imperialismo parte de la torta de la economía mundial. Para ello, era necesario apoyarse en las masas y movilizarlas contra el imperialismo. Ahora bien, en ese proceso los trabajadores se dan cuenta que sus intereses van más allá que la burguesía nativa. El peronismo jugó ese papel histórico en el país, el de movilizarlas pero a su vez regimentarlas para colocarlas como furgón de cola de los intereses de la burguesía nacional. Finalmente, de lo que se trata y ese es nuestro objetivo como partido es explicar incansablemente que esta experiencia ya agotada, hay que superarla, construyendo un partido de los trabajadores.
- ¿Si se planteara un golpe de la derecha defenderían a este gobierno?
JM: Si lo defenderíamos. Seríamos unos necios si tomáramos una decisión de apoyo a la derecha. Más allá de las limitaciones insalvables y de los intereses que representa el gobierno, apoyar a la derecha sería entregar a los trabajadores a la reacción.. Nuestra posición al respecto tiene una tradición histórica. Diferente a lo que la izquierda de nuestro país y en otras partes del mundo han planteado. Un ejemplo, el rol del Partido Comunista frente al golpe del Lonardi del '55 o su posición en el golpe del 76'. Mal que les pese, ellos en dichos momentos se alinearon, primero con la Unión Democrática en el 55' (que agrupaba a toda la derecha del país) y, luego, cuando plantearon durante el gobierno de Isabelita un gobierno cívico-militar. Impresentable.
- ¿Y al de Evo Morales, Chávez y Correa?
JP: Ocurre algo parecido con lo que comentó mi compañero anteriormente. Es más, actualmente, frente a los ataques del imperialismo y la derecha de esos países salimos a defenderlos. Ahora bien, de la misma manera ponemos de relieve la incapacidad de dichos gobiernos de actuar consecuentemente contra esos ataques. Ya comentamos el ejemplo de Perón. En el último choque importante entre las masas campesinas y trabajadores y la derecha boliviana, quedó bien claro hasta donde puede ir Evo Morales. Mientras todo el pueblo se movilizaba para defender al gobierno contra la derecha, Evo los mandó a sus casas y pactó con la derecha. Ese pacto se materializó en la última constituyente, que no toca un ápice de los intereses de la burguesía terrateniente. El reclamo de la reforma agraria está a la orden del día. Los intereses de la burguesía nacional y sus gobiernos chocan invariablemente contra los de los trabajadores.
- ¿Qué hacen cuando se dan cuenta que un compañero es mala persona?
JM: Jajá, bueno mirá para nosotros no hay compañeros buenos o malos. Uno puede tener dentro de la organización más afinidad con unos que con otros. Sin embargo, a nosotros nos une un programa, un objetivo. En función de ellos discutimos, debatimos y participamos para lograrlo. Somos una organización colectiva, de militantes que discute democráticamente cual es el mejor camino a seguir en reuniones, plenarios y también, por lo menos una vez por año, en los Congresos del Partido.
JP: Sí, totalmente diferente a los partidos del régimen. Hoy no existe, salvo algunas excepciones, partidos que funcionen de esta manera. Para muestra basta un botón: candidaturas truchas, la "dedocracia" de la cual Moyano hace gala, familiares en las listas sin ningún tipo de contacto con la política y muchos etcéteras! Como funcionamos al interior del Partido, nos proponemos trasladarlo a los sindicatos donde hoy la burocracia hace lo que quiere en contra del trabajador.
- ¿Creen que alguna vez habrá socialismo en la Argentina o es algo para el siglo que viene?
JP: Eso depende de muchos factores. Ahora bien, razones para ello sobran. La crisis mundial, o sea el agotamiento histórico del capitalismo, plantea más que nunca no sólo la vigencia de la revolución sino la necesidad imperiosa de un cambio revolucionario. Retomando las palabras de una revolucionaria alemana, Rosa Luxemburgo, es "socialismo o barbarie". La barbarie son los despidos y las suspensiones, la vuelta del dengue que hace estragos en las barriadas, la miseria salarial, la destrucción de la salud y la educación, entre otras.
JM: Es más, en la actualidad la lucha de los trabajadores y los estudiantes está a la orden del día como lo que pasó en Grecia, Francia y Alemania. ¿Habrá rebeliones y revoluciones? Por supuesto que sí. De lo que se trata es de construir un partido que lleve adelante esa agenda para superar, de una vez por todas, el retroceso civilizatorio al cual nos somete un régimen en descomposición.