martes, 20 de enero de 2009

LA AUDITORIA DIO BIEN

Un peso menos para
el Consejo Escolar

La llegada del informe preliminar de la Auditoría General de la Dirección de Cultura y Educación bonaerense generó un sensible alivio en el Consejo Escolar de Escobar, donde señalaron que sólo se recibieron algunas sugerencias y que la gestión actual del organismo quedó implícitamente aprobada, a pesar de todo el ruido político que se sintió durante 2008 y que incluso puso a algunos consejeros bajo la lupa de la justicia.
"Nos piden determinada formalidad que no estábamos teniendo", sintetizó en diálogo con El Mensajero el presidente del Consejo, José Luis Fabbro, en referencia a las conclusiones de la auditoría, cuyo informe, de 35 hojas, se conoció a fines de diciembre. Las sugerencias recibidas, según precisó, están relacionadas a cuestiones de procedimiento administrativo, como el asiento de determinadas informaciones en carpetas, libros y formularios.
Consultado sobre algunos de los aspectos auditados, el funcionario señaló que "lo que se hizo fue una revisión general del distrito, que fue tocando distintos puntos, como las cuentas del Consejo y la parte del personal". En ese sentido, aseguró que los auditores comprobaron que "no hay ningún desfasaje en el servicio alimentario", aunque reconoció que les recomendaron hacer ajustes en la solicitud de cupos "para que no quede tanto dinero inmovilizado".

Un peso menos
Para el Consejo Escolar el informe de los auditores significó casi un triunfo político, en una batalla cuyos primeros misiles salieron desde el Palacio Municipal y, posteriormente, del Concejo Deliberante, poniendo muy en duda la transparencia del organismo en diversos manejos, en especial del servicio alimentario escolar.
Precisamente, la presidenta de la comisión de Educación del Legislativo, Patricia De la Cruz (PJ), decidió avanzar por la vía judicial y denunciar algunas supuestas irregularidades, como el presunto cobro de un "sobresueldo" del consejero pattista Ricardo Donatelli y anormalidades en la contratación de proveedores. La concejal, en su presentación ante la fiscal Paula Gaggiotti, aseguró que por estos hechos se realizó la auditoría del Consejo. Sin embargo, al menos en el segundo ítem, no se descubrieron faltas graves.
El caso de Donatelli, en tanto, sigue sin definición, ya que la auditoría no se abocó a ese tema por razones de competencia. Entonces, se deberá esperar la investigación de la fiscalía local, que ya estaría trabajando para determinar si es cierto que el ex presidente del Consejo percibe un haber mensual de 13 mil pesos y si, de ser así, existe un marco legal que lo ampare.
Como sea, en los últimos días de 2008 terminó saliendo el sol para el Consejo Escolar, aunque para este nuevo año el pronóstico no descarta otros chaparrones ni alguna tormenta de verano. Por lo pronto, Fabbro ya aprovechó para hacer uso de sus vacaciones y pidió una licencia de dos semanas. El hombre de confianza del intendente Sandro Guzmán tratará de reponer energías para hacerle frente a lo que venga, en un contexto político donde curiosamente las municiones son disparadas por los grupos aliados.