miércoles, 12 de noviembre de 2008

EL ULTIMO "CAFE CULTURA NACION" FUE PARA NO OLVIDAR

"El desaparecido está, existe"
Para Nora, Luciana es lo único que aún puede conservar. Para Mercedes, Mariana es lo único que aún puede recuperar". Con un tramo de la obra "Supongamos", del ciclo "Teatro por la Identidad", dio inicio el último "Café Cultura Nación". Pero esto fue solo el comienzo de lo que aconteció el viernes 31 en la Casa de Cultura de Escobar. El invitado era Carlos Leonardo Fossati, quien encontró su verdadera identidad en 2005. Antes, creyó ser Carlos Roberto. Nació en la comisaría 5ta de La Plata, tiene 32 años y colabora con Abuelas de Plaza de Mayo. Para muchos, el nieto aparecido número 81; para otros, la verdadera cara de una época trágica y decadente, que nunca debió haber sucedido.
El público escuchó paciente y reflexivamente los párrafos que Carlos Fossati iba desprendiendo, con tono pensativo y una mirada esperanzadora.

Hubo una familia
"Hacia quienes me criaron no guardo ningún tipo de rencor. Les estoy agradecido por muchas otras cosas y reconozco en ellos muchos errores. Si un hijo te plantea una inquietud, no podés seguirle mintiendo, aunque sea implícitamente. Eso te crea un montón de sensaciones encontradas que no están nada buenas. Hoy ya tienen 78 y 70 años y no los veo cotidianamente. Hoy estamos en esa etapa, que ojalá pueda modificarse también. Es difícil. No me enteré de forma directa, pero siempre, por más que no lo oculten con mala intención, una mentira de semejante calibre es imposible de sostener".
"Hubo una familia que me buscó desesperadamente por treinta años. Mis padres adoptivos nunca se plantearon la posibilidad de que fuera hijo de desaparecidos. Negaban los problemas, por temor a que pudiera serlo. Dejarse ganar por el miedo hace que los hechos sucedan".

Partidos al medio, por
derecha y por izquierda

"Este tema va más allá de los partidos políticos, porque matar, secuestrar y robar bebés no creo que pueda ser sostenido por ninguno de ellos; tampoco creer que solo se les fue un poco la mano. La gente confunde seguridad con mano dura. Algunos todavía votan por ignorancia. Sin embargo, opinar desde la ignorancia a veces es peor que opinar desde la conveniencia política".

El ADN compulsivo
Ante la pregunta por el dictamen que obliga a conocer los ADN de jóvenes en su misma situación, Carlos fue contundente desde lo humano: "La compulsión del estudio genético, para la mayoría de los que conozco, les resultó un alivio, no ser responsables de este análisis".

Docentes con poca memoria
A diferencia de los otros encuentros, asistieron algunos alumnos secundarios que remarcaron que en las escuelas de Escobar los maestros nunca hablaron de este tema. A pesar de la excepción que hizo denotar la presidenta de la Asociación Amigos de la Biblioteca Municipal en su rol de docente, cualquiera de los presentes conoce lo que no aparece cada 24 de Marzo en las escuelas del distrito.
Este fue un Café diferente, por lo emocionante y porque el Municipio olvidó casualmente enviar la partida para el lunch, que fue cubierta por y de los bolsillos de los excelentes empleados de Cultura.

Frente al espejo
Al finalizar el evento le pedimos a Fossatti que "cerrara" sus ojos y conteste un ping pong muy especial, con lo que llevaba puesto en el corazón. El Mensajero preguntó en primera persona y él apareció:
- ¿Quién soy?
- Soy… Soy Leonardo Fossati, construyendo mi identidad.
- ¿Cuál es mi familia?
- Mis viejos… que no están, mi hijo, mi tía y mi novia.
- ¿Qué quedó de Carlos Roberto?
- Eh… algunas formas.
- ¿Por qué me tocó a mí?
- La lotería de la vida...
- Basta... (abrazos).
Ariel J. Spadaro

Ocho encuentros
Viernes por medio, desde el 25 de julio pasaron por "Café Cultura Nación" el cuentista Alberto Laiseca, los actores Horacio Peña y Norberto Gonzalo, el doctor en Educación Pablo Pineau, la licenciada Lidia Sausto, el periodista y docente Juan Perone, la pobre versión escobarense de "Buenos Muchachos" del Municipio y, en la octava y última cita, Carlos Fossati.