Dos comisarías con nuevos jefes
Una regla no escrita en la carrera policial desaconseja que un jefe permanezca más de dos años en un mismo destino. El riesgo de aburguesarse, perder la motivación y que el personal ya no responda como al comienzo, según esta máxima, suele no hacer excepciones. Rubén Aspani, "el Turco", como lo llaman en el ambiente, ya había cumplido ese ciclo. Y más que nada por eso la Jefatura Departamental dispuso su traslado. En su lugar asumió Walter Gómez, que estaba en Garín justamente hace casi tres años, y en la comisaría de la calle Padre Perna entró en funciones un capitán que viene de Rafael Castillo.
La gestión de Aspani, ahora destinado a la Jefatura Distrital de Campana, no quedará en la historia de la seguridad escobarense, porque no sobresalió ni fue un desastre. Tuvo flojeras con algunas seguidillas de asaltos y robos a comercios y viviendas, aunque su principal déficit es que nunca pudo tomarle la mano a la sustracción de autos en la vía pública. El promedio de un hecho por día en pleno centro urbano resulta excesivo, y bajarlo es el principal desafío con que se encuentra el flamante titular de la 1ra.
El capitán Gómez -41 años, casado, tres hijos, vive en Quilmes y lleva 22 años en la fuerza- viene de Garín, donde la problemática de los autos era muy menor -4 ó 5 al mes-, pero sabe bien que acá el panorama es mucho más complejo y está dispuesto a revertirlo. Sus primeras medidas fueron sacar todo el personal a la calle y que ningún patrullero esté ocioso. Cuando El Mensajero lo entrevistó en su despacho, el jueves a la mañana, aseguró que tenía cubiertas las cinco cuadrículas, una pareja recorriendo a pie la zona comercial y móviles de refuerzo pertenecientes a su servicio externo. Dicha unidad está a cargo del teniendo Diego Juárez, que acompañó a Gómez en su paso por Garín y Savio. La otra mano del nuevo taquero es el capitán Eduardo Vega, quien cumple tareas de segundo jefe.
El debut de la nueva gestión no fue nada sencillo. Una alumna del colegio San Luis denunció el martes al mediodía -apenas asumió Gómez- que en la esquina de Estrada y Colón un sujeto descendió de un Ford Falcon color crema y la quiso interceptar, no sabe si con fines de robarle, privarla de su libertad u otras intenciones, ya que la menor pudo zafarse y escapó corriendo.
En el intranquilo barrio Lambertuchi, en tanto, se descubrió el miércoles un homicidio ocurrido presuntamente cinco días atrás. El cuerpo de un hombre de 65 años, al que se identificó como Gil Fernández Valdez -plomero, vivía solo- fue encontrado en estado de descomposición en un local que usaba como casa sobre la calle Orquídeas, entre Claveles y Las Rosas. Un golpe en su cabeza sería la causa de la muerte, sobre cuya autoría la policía ya manejaba las primeras líneas de investigación.
Mientras tanto, en Garín, el capitán Héctor Luis González -41 años, 25 de carrera, casado, 4 hijos, vive en José C. Paz- se hizo cargo de Escobar 3ra en la mañana del miércoles. El ex titular de la comisaría de Rafael Castillo, en La Matanza, manifestó a El Mensajero su interés en revertir la desconfianza de las víctimas que no denuncias hechos ocurridos en los barrios, sobre lo cual prevé trabajar en conjunto con las entidades intermedias.
"Dentro de esta Departamental, a la que podría considerarse del interior de la provincia, creo que Garín es la que más se asemeja a una localidad típica del Conurbano. El 70% de sus calles son de tierra y conviven distintas clases sociales, con sectores muy pobres rodeados de countries", analizó González. Su jefe de calle es el teniente Ezequiel Peñalba, que ya estaba en esa comisaría, mientras que como número dos de la dependencia asumiría provisionalmente el capitán Reynaldo Maidana, que hasta esta semana prestaba servicios en Belén de Escobar.
La gestión de Aspani, ahora destinado a la Jefatura Distrital de Campana, no quedará en la historia de la seguridad escobarense, porque no sobresalió ni fue un desastre. Tuvo flojeras con algunas seguidillas de asaltos y robos a comercios y viviendas, aunque su principal déficit es que nunca pudo tomarle la mano a la sustracción de autos en la vía pública. El promedio de un hecho por día en pleno centro urbano resulta excesivo, y bajarlo es el principal desafío con que se encuentra el flamante titular de la 1ra.
El capitán Gómez -41 años, casado, tres hijos, vive en Quilmes y lleva 22 años en la fuerza- viene de Garín, donde la problemática de los autos era muy menor -4 ó 5 al mes-, pero sabe bien que acá el panorama es mucho más complejo y está dispuesto a revertirlo. Sus primeras medidas fueron sacar todo el personal a la calle y que ningún patrullero esté ocioso. Cuando El Mensajero lo entrevistó en su despacho, el jueves a la mañana, aseguró que tenía cubiertas las cinco cuadrículas, una pareja recorriendo a pie la zona comercial y móviles de refuerzo pertenecientes a su servicio externo. Dicha unidad está a cargo del teniendo Diego Juárez, que acompañó a Gómez en su paso por Garín y Savio. La otra mano del nuevo taquero es el capitán Eduardo Vega, quien cumple tareas de segundo jefe.
El debut de la nueva gestión no fue nada sencillo. Una alumna del colegio San Luis denunció el martes al mediodía -apenas asumió Gómez- que en la esquina de Estrada y Colón un sujeto descendió de un Ford Falcon color crema y la quiso interceptar, no sabe si con fines de robarle, privarla de su libertad u otras intenciones, ya que la menor pudo zafarse y escapó corriendo.
En el intranquilo barrio Lambertuchi, en tanto, se descubrió el miércoles un homicidio ocurrido presuntamente cinco días atrás. El cuerpo de un hombre de 65 años, al que se identificó como Gil Fernández Valdez -plomero, vivía solo- fue encontrado en estado de descomposición en un local que usaba como casa sobre la calle Orquídeas, entre Claveles y Las Rosas. Un golpe en su cabeza sería la causa de la muerte, sobre cuya autoría la policía ya manejaba las primeras líneas de investigación.
Mientras tanto, en Garín, el capitán Héctor Luis González -41 años, 25 de carrera, casado, 4 hijos, vive en José C. Paz- se hizo cargo de Escobar 3ra en la mañana del miércoles. El ex titular de la comisaría de Rafael Castillo, en La Matanza, manifestó a El Mensajero su interés en revertir la desconfianza de las víctimas que no denuncias hechos ocurridos en los barrios, sobre lo cual prevé trabajar en conjunto con las entidades intermedias.
"Dentro de esta Departamental, a la que podría considerarse del interior de la provincia, creo que Garín es la que más se asemeja a una localidad típica del Conurbano. El 70% de sus calles son de tierra y conviven distintas clases sociales, con sectores muy pobres rodeados de countries", analizó González. Su jefe de calle es el teniente Ezequiel Peñalba, que ya estaba en esa comisaría, mientras que como número dos de la dependencia asumiría provisionalmente el capitán Reynaldo Maidana, que hasta esta semana prestaba servicios en Belén de Escobar.
