lunes, 19 de mayo de 2008

LOS DOS LADOS DE UNA SESION

Testimonios en el
cuarto intermedio

Al término de la conflictuada sesión del lunes, sus protagonistas hablaron con El Mensajero sobre lo ocurrido.
El presidente de la bancada oficialista, Maximino Conca, defendió la decisión de adjudicar el recorrido licitado a MOTSA en beneficio de los usuarios. "Los concejales no somos abogados ni contadores para hacer análisis exhaustivo, pero estuvimos trabajando durante 45 días con el expediente, hicimos nuestras consultas a los técnicos y se priorizó la necesidad de la gente, que hace muchos años viene pidiendo al Concejo Deliberante otra alternativa para salir de Savio. Estoy muy dolido por lo que pasó. Nosotros obramos de buena fe".
Desde el bloque Acción Vecinalista de Escobar, su titular, Alejandro Fedeli, remarcó la transparencia del proceso licitatorio a la vez que se mostró herido por las acusaciones de corrupción que lo salpicaron en su sexto mes de mandato. "Acá no hay ninguna cosa rara, queremos que la gente viaje mejor y una forma de lograrlo es que en vez de seis colectivos tenga doce. Yo entiendo que los choferes vengan a defender su salario, pero me parece que les llenaron la cabeza. Los concejales les propusimos darles una copia del expediente para analizarlo con un abogado que no sea de la empresa y que vean que la licitación es limpia. Si acá hay un sobre por otro lado, nosotros no lo sabemos. Obviamente no pongo las manos en el fuego por los demás, pero los concejales hicimos lo que teníamos que hacer. Es muy doloroso que te acusen gratuitamente y seguro que vamos a ir a la Justicia. Con Marcelo Accifonte -supervisor de la 291- nos conocemos desde chicos y lamento mucho que ahora me quiera apretar con una carta documento".
El único voto en contra de la adjudicación a MOTSA fue de la concejal pattista Patricia Césari, quien consideró que la definición del expediente se tendría que haber pospuesto. "Desde el momento que nos están acusando de actos administrativos corruptivos, creo que esto tendría que haber permanecido en comisión para un mejor tratamiento. No se puede aprobar una licitación en estas condiciones. Por este tema ya pasamos por un problema similar y nos demandaron a todos porque estaba mal, entonces no entiendo por qué exponernos a otro conflicto".
Quien sin ser concejal buscó involucrarse en la discusión fue el secretario de Gobierno, José María Rognone, que vive en Savio y en su época de edil del Paufe se puso al frente de la cruzada por un mejor servicio de autotransporte para su localidad. "En lo personal es un momento de orgullo y alegría, porque se terminó con una lucha que llevaba cuatro años. Esta licitación ha sido transparente y no se puede cambiar un fallo con prepotencia, golpes o bombos, como hizo hoy la línea 291. Su comportamiento me pareció lamentable, pero las grandes empresas siempre se resisten a que les toquen el monopolio. Nosotros, como funcionarios, debemos defender los intereses de los usuarios y esto es una señal para las demás empresas, que si no dan un buen servicio a los vecinos tendrán competencia".
Rognone, además, cuestionó la posición planteada por la concejal de su ex partido. "Me parece una vergüenza que Patricia Césari siga defendiendo los intereses de las empresas y no haya acompañado este proyecto", sentenció. Y ante la consulta de este medio, la réplica de la mujer no se hizo esperar: "A mí muchas cosas me parecen lamentables y sin embargo estoy acá", disparó la legisladora contra su otrora compañero de bloque.
Sin su ímpetu del día de la sesión, cuando irrumpió entre los concejales para defender a la empresa de la que es apoderada, Estela Accifonte evitó utilizar la palabra corrupción y cualquiera de similar connotación a la hora de analizar los hechos. "Seguimos considerando que fuimos los mejores oferentes y que tal vez por un error administrativo o mala interpretación de nuestra oferta no nos hemos visto beneficiados. No se han contemplado para nada nuestros antecedentes, que son impecables, ni se leyeron las impugnaciones que hicimos contra MOTSA, que no es una empresa del partido, tiene muchísimos incumplimientos y un montón de falencias que no entiendo por qué el Municipio no controla", señaló con interrogantes sugerentes.
Representantes de La Central de Escobar mantuvieron una serie de reuniones con el secretario de Gobierno, pero nada indica que el intendente Sandro Guzmán esté dispuesto a vetar una ordenanza por cuya sanción sus concejales pagaron un alto precio.