lunes, 22 de septiembre de 2008

LA ASOCIACION AMBIENTALISTA DE ESCOBAR EMPIEZA A HACERSE OIR


Guardianes de la naturaleza
Hasta hace poco más de un año, la única voz escobarense que se alzaba en defensa del medio ambiente era la de la ONG Esco-Delta, cuya solitaria aunque firme prédica contra el basural isleño hizo germinar en otros la semilla de la conciencia ecológica. Así surgió la flamante Asociación Ambientalista del partido de Escobar (AAPE), que tras meses de reunirse a modo de asamblea acaba de constituirse como entidad de bien público y empieza a tomar un rol activo en la discusión de muchos asuntos locales.
Elsa Iglesias de Claret, Diego Luzuriaga y Viviana Rebasa coincidieron por primera vez en un lugar el 13 de mayo de 2007, cuando el Club de Leones se convirtió en un histórico cabildo abierto donde más de trescientas personas clamaban el cese de actividades del ahora clausurado predio de Transportes Olivos. Elsa nació en Belén hace 73 años y adora la isla, Diego -profesor de inglés- se instaló en El Cazador en 2000 y Viviana -docente de ciencias exactas- llegó a ese mismo barrio en 1996. Hoy son presidenta, vicepresidente y tesorera, respectivamente, de AAPE, una institución que brega para que la Capital de la Flor no pierda su identidad y provea a sus habitantes una mejor calidad de vida.
Estos nuevos guardianes de la naturaleza, en diálogo con El Mensajero, expusieron ante cada tema una mirada crítica con propuestas constructivas, en una entrevista que invita a reflexionar sobre la realidad que rodea a los escobarenses.
- ¿Están conformes con que se haya cerrado el basural?
EC: Hasta el momento las autoridades no nos han explicado el procedimiento, creo que es una deuda que tienen pendiente con nosotros. Si un día antes de la clausura nos seguían diciendo que las pruebas daban todas bien, me parece que deberían darnos una explicación y decirnos qué va a pasar.
DL: Lo que queremos saber es el estado legal de la clausura, cuáles son las autoridades que van a definir el destino de ese lugar y los planes de saneamiento a futuro.
VR: Aunque el lugar esté cerrado, esa basura que está ahí puede seguir contaminando por doscientos años. Si no se sanea y todo queda ahí, no se resuelve nada.
- ¿Sintieron la clausura como un triunfo parcialmente propio?
DL: Entendemos que es un trabajo de muchas personas y también reconocemos la acción de Esco-Delta, con la que en su momento trabajamos a la par. Pero está muy lejos de nosotros querer atribuirnos ese mérito. Creo que cayó por su propio peso.
- ¿Qué opinan de que ahora los residuos de Escobar se envíen al Ceamse?
DL: Desde siempre estuvimos en contra de importar o exportar la basura y promovimos la creación de una planta de tratamiento de residuos. El año pasado obtuvimos que todos los candidatos a intendente se comprometan por escrito a crear la planta de reciclaje.
VR: No pretendemos que sea una obra faraónica. Se puede empezar con un terreno al que se lleven cartones, papeles y vidrios para ir separándolos, hasta llegar a la totalidad de los residuos. Esta es una cuestión que nos parece prioritaria dentro de los temas ambientales.
- ¿Notan avances en esa dirección?
DL: Hasta ahora no. Y nos llama la atención que dentro de la "tasa verde" no se menciona en absoluto la planta de residuos a la que se comprometió el actual intendente. Solo se habla de campañas de reciclaje, pero eso no es algo tangible ni concreto. No colma la promesa.
- Recientemente el Intendente los invitó a trabajar en conjunto, ¿piensan hacerlo?
DL: Siempre quisimos dialogar con las autoridades, pero nuestra visión es muy distinta a la del Municipio. Todavía no podemos entender como en 1994 uno de los lugares más valiosos ecológicamente fue destinado a basural y convalidado por autoridades que aún continúan. Queremos acercarnos al Municipio con nuestras propuestas y que ellos, ya que han empezado a escucharnos, puedan adoptar la agenda que propone la asociación.
- ¿Cuál es la posición que tienen respecto a la llegada de grandes emprendimientos urbanísticos, principalmente sobre la zona del humedal escobarense?
DL: Más que nuestra posición, es la posición que determina la ley. Hasta donde sabemos, asesorados por abogados ambientalistas como Mario Capparelli, los emprendimientos no serían legales. De manera que estamos perplejos ante el avance de las obras, que en "El Cazal" continúan pese a un amparo judicial. La alteración del humedal ya se consumó. Y no sabemos si previamente hubo un estudio de impacto ambiental aprobado.
- ¿Es cierto que en "El Cantón" se hallaron restos óseos que tendrían un alto valor arqueológico?
VR: Sí, presumiblemente serían restos de vértebras de ballena y suponemos que habría otros. Pasa que no se sabe más porque a la gente que trabaja ahí la tienen amenazada para que no hable, porque si se supiera tendrían que paralizar las obras. Sería un sitio histórico y no lo podrían tocar.
DL: No conozco la realidad legal de eso, pero la Municipalidad, por lo menos, debería ir a ver in situ lo que está apareciendo.
- ¿Sienten que en la gente todavía está la idea de que un humedal no es más que un simple bañado y que por eso no se los valoriza?
DL: Es así. Sin embargo, los humedales tienen dos veces más capacidad de absorción de carbono que las selvas tropicales, son muy importantes para filtrar y purificar el agua y para la reproducción de las especies.
VR: Además son productores de oxígeno y pueden soportar cambios abruptos de temperatura, ya que son más resistentes que otros ecosistemas. Por eso se han vuelto aún más importantes. Pueden soportar calores muy grandes, sequías, inundaciones y frío. Y son muy productivos.
- ¿Qué consecuencias va a sentir Escobar si los humedales se pueblan de barrios cerrados?
VR: La subida del agua podría provocar una inundación terrible, porque no va a ser absorbida. Y desde el punto de vista urbanístico, se está sumando gente sin pensar en lo que puede soportar la estructura de la ciudad. Además, el acuífero del que se extrae el agua es producido por la naturaleza, no es una fábrica, y si no hay lluvias no tiene cómo recargarse. Por eso me pregunto cómo se va a hacer para abastecer de agua a toda la población.
DL: Ya que hablamos del agua, en Escobar la mayoría se abastece a través de perforaciones y el Municipio no toma muestras, o no las da a conocer, sobre el estado del agua de las napas. No sabemos si el agua que consumimos diariamente nos está haciendo daño a la salud.
- A propósito del aspecto urbanístico, que recién se mencionó, ¿cómo ven la proliferación de edificios torre?
EC: Me parece que Escobar no está diseñado para tantas torres ni se han tomado las precauciones. Por supuesto que a mí no me gusta, pero soy conciente de que no puedo ir contra el progreso. Sin embargo, me alarmo cuando escucho que van a venir a vivir cincuenta mil personas más, porque no veo a Escobar preparado para tanta gente. Yo sueño con el Escobar lleno de árboles, mientras que hoy hay cuadras enteras en las que no quedó uno solo porque cuando hacen un edificio los talan y no se obliga a los propietarios a reponerlos.
DL: Está claro que hace falta un plan maestro urbano. Se necesita mucho diálogo entre las autoridades y la ciudadanía para definir ese desarrollo.
- Desde agosto el Municipio implementó la "tasa verde", ¿piensan realizar algún tipo de control sobre el destino de esos fondos?
VR: Nuestra idea es abocarnos a todas las necesidades ambientales que tiene el partido de Escobar. Vamos a controlar el cumplimiento de los puntos que plantea la "tasa verde", dentro de los cuales hubiésemos incluido muchos más. Por ejemplo: tratar los residuos del distrito, ya sea con una planta de tratamiento o comenzando con algo menos costoso como disponer de un galpón donde empezar a separar los materiales. De esa forma se le podría dar un trabajo más digno a los cartoneros, que tienen que estar trabajando insanamente en las calles.
EC: Me sorprende que el Municipio no tome ninguno de los ejemplos existentes al respecto. Aquí han venido a exponer sus experiencias de Federal (Entre Ríos) y Trenque Lauquen (Buenos Aires) y hay muchos más en la provincia. Si esa gente lo pudo hacer, ¿por qué no vamos a poder hacerlo nosotros?
- ¿Están al tanto de que se estén dando charlas en las escuelas?
VR: El director de Salud Ambiental, Gustavo González Marín, nos dijo que está yendo a las escuelas, pero no en forma periódica, porque explicó que son muchos colegios y a lo sumo se llegaba a visitarlos una vez. Pero así no se logra ningún cambio en la educación de la gente para proteger el medio ambiente. Y en la "tasa verde" se contempla el plano de la educación, así que debería haber una disponibilidad de dinero para ese trabajo y que se tome en serio, como corresponde.
DL: Además, el sistema no son las charlas sino las acciones concretas. Por ejemplo, la escuela de El Cazador recicla pilas. Y lo que habría que hacer es crear un circuito así, con contenedores apropiados. Las campañas funcionan con acciones, no con un funcionario que va a hablar.
EC: Desde la asociación, con nuestros especialistas, habíamos iniciado una serie de charlas destinadas a estudiantes en la Casa de la Cultura, pero a las escuelas se les hace difícil salir y muchos chicos ni siquiera pueden pagar un boleto. Sería importante que el Municipio ayude en eso.
- ¿Qué otros temas tiene en agenda la asociación?
DL: Revertir el deterioro urbanístico, que se observa en la contaminación visual, la ocupación de las veredas, para que Escobar tenga una mayor calidad de vida, preserve sus bellezas y sea un lugar atractivo para el turista. Nos preocupa que eso no está pasando y se observa un deterioro casi a cada cuadra. Se han perdido patrones estéticos que incluso afectan la circulación peatonal y el tránsito. Por otra parte, el Municipio es muy reticente a suministrar información sobre cuestiones realmente importantes, como la traza de un camino interior que vendría desde la ruta 26 y Panamericana hasta la entrada a El Cazador, que no sabemos si fue condición para autorizar la instalación de los nuevos barrios cerrados, y si se va a hacer alguna conexión con la planta de suministro de agua potable que Tigre va a hacer en Dique Luján. El transporte público es otro tema donde se ve un gran déficit, tanto en los trenes como en los colectivos. Mucha gente preferiría usar menos sus autos particulares y así se aliviaría el tránsito. También es preocupante que no haya bicisendas para una mayor circulación de ciclistas.
- Existen otras ONG's locales dedicadas al medio ambiente, como Esco-delta y Los Talares. ¿Sería posible que planifiquen acciones conjuntas para darle más fuerza a los temas que están trabajando?
VR: También está la asociación Ciclo Evolutivo. Y con Los Talares nos conocemos y estamos en contacto. Por ahora no hemos planificado nada juntos, pero sí, creemos que cuantos más seamos, más fuerza va a tener lo queramos hacer.
- ¿Algún comentario final?
DL: Quisiera agregar que, si bien no nací acá, para mí Escobar es la ciudad de la flor y eso hay que recalcarlo, porque hay un desarrollo, en parte inevitable, que le está dando la espalda a esa identidad. Escobar debería seguir siendo el municipio de la flor y de los ríos. No lo podemos perder de vista.
VR: Nosotros somos ciudadanos como cualquier otro, que simplemente hemos tomado conciencia de que si no nos agrupamos, no podemos lograr fines importantes para la vida en la comunidad. Ojalá que la gente se dé cuenta de que no se puede esperar que los problemas los resuelva el otro. Hay que participar.

Temaikèn
Hace unos meses, AAPE mantuvo reuniones con distintas empresas de la zona para pedirles que dejaran de arrojar sus residuos en el basural de la ruta 25. De algunas obtuvieron eco favorable, pero con otras quedaron molestos. "Nos sorprende mucho que una empresa como Temaikèn, que trabaja en el área ambiental, en la preservación de especies, no verificase el destino final de sus residuos. Y también creo que debe rever urgentemente su política de utilización de material descartable en la parte de gastronomía, porque eso genera una gran contaminación", criticó Luzuriaga.