Una mirada femeninade la política y Escobar
Con el impulso de Elisa Carrió y Margarita Stolbizer, Aída Holtz llegó a colocar en el quinto puesto su doble candidatura de intendente y concejal de las últimas elecciones. Pero la actual fusión de todo el arco kirchnerista y sectores disidentes del pattismo en el gobierno municipal robusteció su figura de referente opositora y líder de la Coalición Cívica de Escobar.
Docente y directora del Instituto LEA, integrante de la Mesa Redonda Panamericana y de la Sociedad Argentina de Escritores, asegura que las mujeres tienen otra concepción de la política y habla con El Mensajero sobre el estado de situación de Escobar.
- ¿Qué está haciendo la Coalición Cívica desde las últimas elecciones?
- Estamos en un momento de organización. Estuve con Margarita Stolbizer en Lincoln, donde se unieron el ARI con el GEN, y me pidió especialmente que intente juntar a los radicales independientes, con quienes ya empecé a hablar. Me parece bueno que haya distintos sectores y que confluyan en una coalición. Tiene que haber una diferenciación de las ideas. El mundo no se mueve por la izquierda y la derecha, se mueve por lo económico. Y aparte, hay tanta buena como mala gente de un lado y de otro. Hay un cambio muy grande, por eso los partidos políticos tradicionales están teniendo tantas dificultades. Nosotros nos movemos con la conciencia, la rectitud y los principios. La ideología sería el testimonio de vida, los valores que una persona puede tener: no ser corrupto, haber trabajado siempre, no buscar en la política un negocio. Esos son los valores que priman. Otra cosa no me interesa.
- Habló de sumar radicales, ¿a quiénes le gustaría integrar en este espacio político?
- Yo veo más a las personas que a los partidos políticos. Me gustaría integrar a gente del socialismo como Lidia Amarillo, a radicales como Rubén Alberoni o Roberto Gaytán, aunque quizás ya no quieran participar más, porque han sido luchadores toda la vida y otros más zorros, más astutos, han logrado que no estén. Si bien es cierto que sin estar en la política se pueden hacer mil cosas, y de hecho, lo estoy demostrando, porque participo en muchas instituciones y es una prueba de que puedo hacer un montón de cosas sin necesidad de estar en la política.
- ¿Cómo hacen para seguir de cerca la gestión municipal sin tener representación parlamentaria?
- Nosotros nos venimos reuniendo y una de las ideas que ha salido es sacar un boletín informativo con nuestras ideas, para que la gente conozca qué pensamos y a qué aspiramos. También hablamos de presentar pedidos al Concejo Deliberante, para que nos informe sobre determinados temas. Por ejemplo, adónde fue a parar todo lo que se está cobrando por la tasa "verde" y la universidad. O sea, ¿dónde están los recursos que supuestamente eran para determinada cosa?
- ¿Cómo ve a Escobar?
- Lo veo muy sucio, muy descuidado. Los barrios están mal. Me da la sensación de que se está haciendo, pero muy lento. Y está bien que se hagan cosas en Garín y en Savio, porque son lugares que han sido relegados y necesitan mucho, pero en Belén también se cobran impuestos y me parece que ahora se está postergando a su centro y sus barrios. Además, hay problemas con el tránsito y el estacionamiento, semáforos que no andan. Y de la noche de Escobar me siguen llegando cosas... Debería haber más control sobre lo que se consume en los boliches.
- Si no fuera por la sustracción de boletas que sufrieron en las últimas elecciones, quizás hoy usted estaría sentada en una banca. En ese caso, ¿qué cree que le aportaría a la política como concejal?
- La verdad que a esta altura de mi vida le aportaría criterio. Estoy de acuerdo con que se haga un polideportivo en Savio, porque es importante que los chicos hagan deporte, pero también estoy harta de que se gaste tanto dinero en esas cosas y después no tengan mantenimiento. Yo haría más inversión en salitas, campañas de agua, de cocina nutricional para los chicos, veredas.
- Por iniciativa de un grupo de personas que usted integra, la UBA en Escobar fue reconocida el año pasado como una "cuestión de Estado". ¿Está de acuerdo con las políticas que ha anunciado e implementado el Municipio?
- Todo va muy lento. La idea era que se haga un edificio y hasta ahora quedó ahí. Los políticos y la gente se tienen que dar cuenta de que si no le ponemos ganas a este tema, vamos a quedar aislados. De acá pueden salir no solo profesionales de floricultura sino también de otras carreras. Además, se pueden firmar convenios para que vengan otras universidades. Cuando uno elige un cargo político tiene que matarse para cumplir, porque esto es sangre, sudor y lágrimas.
- El Intendente se repite en invitar a la oposición a dejar de criticarlo y aportar propuestas para la gente. ¿Usted recogió ese guante?
- No, no lo recogí, porque no era para mí. Si me preguntan qué opino, yo les digo. Me gustaría que nos convoquen a los que estamos afuera para hablar de estos temas y sobre todo de la universidad y de medio ambiente.
- Para quienes no conocen su perfil, ¿con qué se identifica más de Elisa Carrió y en qué aspectos difiere?
- Coincido con ella en el aspecto moral: Si yo me vendo al mejor postor, voy a llegar más rápido, pero no voy a llegar con rectitud. Entonces me pueden decir: "yo te ayudé a llegar, ahora devolveme el favor". Acá hay que llegar sin favores de nadie, hay que seguir un camino recto. Creo que la sociedad se está dando cuenta de que la rectitud, que es algo que nos está faltando, empieza a tener vigencia, que está bueno ser honesto, no mentir, no venderse al mejor postor. Esto es una ideología de vida. La otra parte que le admiro muchísimo es su intelecto, es impresionante lo que sabe esa mujer. Después, yo no ataco su religiosidad, porque a nadie le hace mal lo que crea. De hecho, cuando fue el tema del aborto ella planteó que se votara con libertad de conciencia. Me parece que su falla es no saber unir y no ver que mucha gente se agarra de ella para ascender.
- Si bien puede explicarse porque su líder es mujer, ¿a qué atribuye tanto protagonismo del género en el ARI y la Coalición?
- Porque la vemos como alguien que le da lugar a las mujeres y muchas pensamos como ella. Igual hay muchos hombres. Pero me da la impresión de que los hombres, en general, piensan la política como un empleo público y un lugar de ascenso personal, son como más especuladores y materialistas. Lo que vemos nosotros es que la política es un servicio. Yo lo creí siempre así. Es una mirada más espiritual.
- ¿Qué opinión tiene de Cristina?
- Aunque parezca mentira, la Coalición Cívica la quiere ayudar, en la medida que ella lo permita. La veo muy dudosa, si bien ahora ha bajado los decibeles y está más dosificada. Pero un presidente debe transparentar su gestión y no hacer cosas como las que se hacen con el INDEC.
- ¿Y de Scioli?
- "Lilita" lo quiere, es muy educado... Pero nada más.
- ¿Volvería a ser candidata?
- En este momento, no sé. Me da la sensación de que tengo que dejarle lugar a gente más joven, con otras ideas y otras ganas, e impulsar a los demás. También sé que todavía tengo para dar un montón de cosas, pero vamos a ver...
Divino tesoro
- Desde la perspectiva que le permite su actividad como directora de un colegio secundario, ¿cómo ve a la juventud?
- La veo apática, en sus cosas. Ellos están formando tribus, se sigue con el tema de la bebida y las drogas, hay fenómenos nuevos como chicos que golpean a sus hermanas, novios que golpean a sus novias, demasiados embarazos adolescentes, hay enfermedades venéreas. Y recién cuando van a buscar un trabajo y les piden el título se desesperan por terminar el secundario. Pero no es que la juventud empeoró. Los jóvenes tienen una filosofía de vida y son mucho más intensos que los adultos, están más preparados que nosotros mismos para vivir estas crisis y entender lo que pasa. El tema también son los grandes.
Docente y directora del Instituto LEA, integrante de la Mesa Redonda Panamericana y de la Sociedad Argentina de Escritores, asegura que las mujeres tienen otra concepción de la política y habla con El Mensajero sobre el estado de situación de Escobar.
- ¿Qué está haciendo la Coalición Cívica desde las últimas elecciones?
- Estamos en un momento de organización. Estuve con Margarita Stolbizer en Lincoln, donde se unieron el ARI con el GEN, y me pidió especialmente que intente juntar a los radicales independientes, con quienes ya empecé a hablar. Me parece bueno que haya distintos sectores y que confluyan en una coalición. Tiene que haber una diferenciación de las ideas. El mundo no se mueve por la izquierda y la derecha, se mueve por lo económico. Y aparte, hay tanta buena como mala gente de un lado y de otro. Hay un cambio muy grande, por eso los partidos políticos tradicionales están teniendo tantas dificultades. Nosotros nos movemos con la conciencia, la rectitud y los principios. La ideología sería el testimonio de vida, los valores que una persona puede tener: no ser corrupto, haber trabajado siempre, no buscar en la política un negocio. Esos son los valores que priman. Otra cosa no me interesa.
- Habló de sumar radicales, ¿a quiénes le gustaría integrar en este espacio político?
- Yo veo más a las personas que a los partidos políticos. Me gustaría integrar a gente del socialismo como Lidia Amarillo, a radicales como Rubén Alberoni o Roberto Gaytán, aunque quizás ya no quieran participar más, porque han sido luchadores toda la vida y otros más zorros, más astutos, han logrado que no estén. Si bien es cierto que sin estar en la política se pueden hacer mil cosas, y de hecho, lo estoy demostrando, porque participo en muchas instituciones y es una prueba de que puedo hacer un montón de cosas sin necesidad de estar en la política.
- ¿Cómo hacen para seguir de cerca la gestión municipal sin tener representación parlamentaria?
- Nosotros nos venimos reuniendo y una de las ideas que ha salido es sacar un boletín informativo con nuestras ideas, para que la gente conozca qué pensamos y a qué aspiramos. También hablamos de presentar pedidos al Concejo Deliberante, para que nos informe sobre determinados temas. Por ejemplo, adónde fue a parar todo lo que se está cobrando por la tasa "verde" y la universidad. O sea, ¿dónde están los recursos que supuestamente eran para determinada cosa?
- ¿Cómo ve a Escobar?
- Lo veo muy sucio, muy descuidado. Los barrios están mal. Me da la sensación de que se está haciendo, pero muy lento. Y está bien que se hagan cosas en Garín y en Savio, porque son lugares que han sido relegados y necesitan mucho, pero en Belén también se cobran impuestos y me parece que ahora se está postergando a su centro y sus barrios. Además, hay problemas con el tránsito y el estacionamiento, semáforos que no andan. Y de la noche de Escobar me siguen llegando cosas... Debería haber más control sobre lo que se consume en los boliches.
- Si no fuera por la sustracción de boletas que sufrieron en las últimas elecciones, quizás hoy usted estaría sentada en una banca. En ese caso, ¿qué cree que le aportaría a la política como concejal?
- La verdad que a esta altura de mi vida le aportaría criterio. Estoy de acuerdo con que se haga un polideportivo en Savio, porque es importante que los chicos hagan deporte, pero también estoy harta de que se gaste tanto dinero en esas cosas y después no tengan mantenimiento. Yo haría más inversión en salitas, campañas de agua, de cocina nutricional para los chicos, veredas.
- Por iniciativa de un grupo de personas que usted integra, la UBA en Escobar fue reconocida el año pasado como una "cuestión de Estado". ¿Está de acuerdo con las políticas que ha anunciado e implementado el Municipio?
- Todo va muy lento. La idea era que se haga un edificio y hasta ahora quedó ahí. Los políticos y la gente se tienen que dar cuenta de que si no le ponemos ganas a este tema, vamos a quedar aislados. De acá pueden salir no solo profesionales de floricultura sino también de otras carreras. Además, se pueden firmar convenios para que vengan otras universidades. Cuando uno elige un cargo político tiene que matarse para cumplir, porque esto es sangre, sudor y lágrimas.
- El Intendente se repite en invitar a la oposición a dejar de criticarlo y aportar propuestas para la gente. ¿Usted recogió ese guante?
- No, no lo recogí, porque no era para mí. Si me preguntan qué opino, yo les digo. Me gustaría que nos convoquen a los que estamos afuera para hablar de estos temas y sobre todo de la universidad y de medio ambiente.
- Para quienes no conocen su perfil, ¿con qué se identifica más de Elisa Carrió y en qué aspectos difiere?
- Coincido con ella en el aspecto moral: Si yo me vendo al mejor postor, voy a llegar más rápido, pero no voy a llegar con rectitud. Entonces me pueden decir: "yo te ayudé a llegar, ahora devolveme el favor". Acá hay que llegar sin favores de nadie, hay que seguir un camino recto. Creo que la sociedad se está dando cuenta de que la rectitud, que es algo que nos está faltando, empieza a tener vigencia, que está bueno ser honesto, no mentir, no venderse al mejor postor. Esto es una ideología de vida. La otra parte que le admiro muchísimo es su intelecto, es impresionante lo que sabe esa mujer. Después, yo no ataco su religiosidad, porque a nadie le hace mal lo que crea. De hecho, cuando fue el tema del aborto ella planteó que se votara con libertad de conciencia. Me parece que su falla es no saber unir y no ver que mucha gente se agarra de ella para ascender.
- Si bien puede explicarse porque su líder es mujer, ¿a qué atribuye tanto protagonismo del género en el ARI y la Coalición?
- Porque la vemos como alguien que le da lugar a las mujeres y muchas pensamos como ella. Igual hay muchos hombres. Pero me da la impresión de que los hombres, en general, piensan la política como un empleo público y un lugar de ascenso personal, son como más especuladores y materialistas. Lo que vemos nosotros es que la política es un servicio. Yo lo creí siempre así. Es una mirada más espiritual.
- ¿Qué opinión tiene de Cristina?
- Aunque parezca mentira, la Coalición Cívica la quiere ayudar, en la medida que ella lo permita. La veo muy dudosa, si bien ahora ha bajado los decibeles y está más dosificada. Pero un presidente debe transparentar su gestión y no hacer cosas como las que se hacen con el INDEC.
- ¿Y de Scioli?
- "Lilita" lo quiere, es muy educado... Pero nada más.
- ¿Volvería a ser candidata?
- En este momento, no sé. Me da la sensación de que tengo que dejarle lugar a gente más joven, con otras ideas y otras ganas, e impulsar a los demás. También sé que todavía tengo para dar un montón de cosas, pero vamos a ver...
Divino tesoro
- Desde la perspectiva que le permite su actividad como directora de un colegio secundario, ¿cómo ve a la juventud?
- La veo apática, en sus cosas. Ellos están formando tribus, se sigue con el tema de la bebida y las drogas, hay fenómenos nuevos como chicos que golpean a sus hermanas, novios que golpean a sus novias, demasiados embarazos adolescentes, hay enfermedades venéreas. Y recién cuando van a buscar un trabajo y les piden el título se desesperan por terminar el secundario. Pero no es que la juventud empeoró. Los jóvenes tienen una filosofía de vida y son mucho más intensos que los adultos, están más preparados que nosotros mismos para vivir estas crisis y entender lo que pasa. El tema también son los grandes.
