martes, 8 de julio de 2008

EL Y VARIOS ESCOBARENSES PARTICIPABAN DEL MITIN

Jobe se amargó por el golpe
comando en la cena de PRO

La irrupción de un grupo de delincuentes armados en una cena partidaria del PRO encabezada por el diputado nacional Jorge Macri, el miércoles en el camping del Sindicato de Comercio de Pilar, tuvo entre sus más de cien víctimas al dirigente escobarense Miguel Jobe, quien consideró que lo sucedido es una muestra de "cómo se está viviendo en la provincia de Buenos Aires".
El inimaginable golpe comando ocurrió en el marco del primer encuentro de este tipo que organiza la denominada Mesa del Río, que aglutina a representantes del macrismo desde Vicente López hasta Campana, incluyendo casualmente a Pilar por su histórica ligazón y comunes características con Escobar. Geográficamente, en rigor de verdad, el complejo donde se desarrollaba el mitin está del lado de la ruta 8 que pertenece al municipio de José C. Paz, aunque la prensa nacional no reparó en el detalle.
Cuando Macri daba por terminada su alocución, por distintas entradas del salón ingresaron sorpresivamente entre ocho y diez sujetos aparentemente jóvenes que apuntando a todos con pistolas los obligaron a arrojarse al piso y a guardar silencio. Así, y en medio de una conmoción generalizada, durante más de veinte minutos los maleantes fueron apropiándose de diversas pertenencias de los comensales. Por ejemplo, a Jobe, que compartía la cabecera de la mesa con Macri, le sustrajeron dinero y su documento de identidad, pero conservó su celular. "A todos nos robaron algo", señaló el nuevo secretario general del PRO bonaerense, junto a quien habían concurrido otros nueve dirigentes y militantes de Escobar.
- El diputado Macri habló de "una zona liberada", ¿usted piensa lo mismo?, le preguntó El Mensajero.
- Es sospechoso... la policía llegó quince minutos después de que la llamáramos. Y a algunas personas, cuando hacían la denuncia telefónica, les preguntaban cosas que no tenían nada que ver. Te da mucha impotencia.
- ¿Qué sensación le deja lo que pasó? ¿Se le ocurre alguna reflexión?
- Que nuestra vida no vale nada. Si bien no pasó más que de un susto o de que alguien recibiera un culatazo, uno está a merced de cualquiera y si alguno quería disparar lo hubiera hecho sin ningún miramiento. Pero bueno, es como se está viviendo en la provincia de Buenos Aires. Esta es la realidad.